Semana para poner de moda LA AMABILIDAD
¡Paz
a tu buen corazón!
Con el mejor deseo te dedico estas líneas animando
y tratando de recuperar un valor fundamental para nuestras relaciones, tanto
familiares como personales. Se trata de SER AMABLES, se caracteriza por nuestra
forma de ser y tratar a los demás. Todo está relacionado con el amor y desde
aquí la cortesía, el buen trato, la disposición, los gestos acompañados de la
sonrisa y las buenas intenciones. Ser amables es un desafío, muchas veces lo
usamos cuando estamos enamorados o necesitamos pedir algo, cuando tenemos un
objetivo y luego parece como esos matrimonios acostumbrados que se sienten
seguros y confiados y creen en algunos casos que no necesitan tratarse bien. Ser
amables en todo tiempo es difícil, pero asi debe ser nuestro trato, sincero,
cordial. En definitiva es una virtud que todos somos capaces y depende de cada
uno. Ser amables no significa ser bueno por costumbre, sino en cada instante, en cada desafío, en las forma de contestar cuando te piden
algo. La amabilidad debe ser nuestra identidad, Estar con personas amables es
sentirse seguro, escuchado, acompañado, comprendido. Debemos cultivar la
amabilidad desde nuestra propia casa, Ser amables es una forma de comportarse; se
puede ser serio pero amable, se puede estar enojado pero no perder la amabilidad, esto significa
maduréz y responsabilidad. El que es amable es porque tiene un alma grande, es
generoso, cordial y seguro que en su alma algo de Dios tiene, porque allí se
aprende cuando nos damos cuanta que nos gustaría que nos traten bien. En algunos
casos pareciera que miramos a otros y decimos ¡que amable que es! ¿Y nosotros?,
quizás tendremos contrariedades y envidias cuando nuestro trato es agradable,
pero debemos seguir sembrando la amabilidad, con el espíritu fresco y el alma
suave `porque allí hay lugar para todos”. Ésto es educación, es vida, es futuro y es fruto de la felicidad. Cuando
estamos con personas amables, tenemos
ganas de volver, nos sentimos escuchados y admirados, por esto invito a todos a
fortalecer ese espíritu, no permitamos que nos traten mal, sepamos corregir a
tiempo, sepamos con madurez decir las cosas bien, Todo pasa por el ejemplo que
demos y la autoridad que imponemos ante gente que no tiene este valor. Existen
lugares donde hay cero amabilidad, pareciera que te están haciendo un favor, a veces en las
oficinas públicas, negocios, y sobre todo en la vida familiar, en la relación
de pareja como también entre padres e hijos. Seguramente podrás decir que no te
sale, pero intentemos ser amables, hablemos del tema, y pongamos en práctica,
Pocas palabras, acompañadas de la simpatía: vamos por mas!!!, aunque nada
tengas, aunque todo se haya perdido no exijamos sino comencemos nosotros mismos
a ser amables. Que Dios nos ayude y el espíritu del amor se encarne en nuestros
sentimientos para entender que la amabilidad es también el pan de cada día.
Hasta la próxima semana que tengamos buena vida y muchos frutos
Oracion de la amabilidad
Sintiendo el deseo de ser feliz cada
día. Ayúdame a comenzar el día con la actitud de la amabilidad, sorprendiendo,
escuchando, sobre todo siendo amables con las personas que me aman y esperan lo
mejor de mí.
Señor, ayúdame a no caer en la desgracia
de no darme cuenta y herir a los demás con mis palabras y actitudes.
Enséñame a ser amable de corazón, que no
pierda los sentimientos con que tú me creaste, que no tenga miedo a actuar por la razón del
amor.
Gracias por tantas personas amables que
vale la pena seguir y aprender. Bendícenos a todos para que podamos serlo en
casa y en todo lugar. Amén
Cuento para tu reflexión:
En
una playa muy lejana, existía una tortuga gigante,
de las que viven más de 200 años. La protagonista de nuestro cuento se llamaba
María, la gran tortuga María.
María tenía 7 años, pero
era ya casi tan grande como una tortuga adulta, esto era porque se
alimentaba muy bien de las algas que tenía el mar.
Además,
a María le gustaba mucho comer, y si había algo sagrado para ella, era la
comida. Un día, un amigo de María, el cangrejo Croqui, se acercó donde estaba comiendo
María, y empezó a comer junto a ella las algas que flotaban en la orilla del
mar. De repente, María le dijo con voz grave a Croqui: “No comas donde estoy comiendo
yo, que me molestas.” Croqui, el
cangrejo morenito, se sintió muy mal y se fue llorando a otra parte. La madre de María, que
lo había observado todo, fue andando donde estaba María y le dijo: “María, te has comportado muy
mal con Croqui, él sólo quería estar a tu lado. Si no eres amable con la gente
que te rodea te quedarás sola
* Alivio del Alma: Hoy muchos VIVEN ENOJADOS.
Acompañemos con nuestro deseo y actitud pidiendo a Dios que el enojo se vaya de
los corazones resentidos y heridos. No vale la pena vivir enojados…¿Cómo podemos
ayudarlos?.
Trabajo
interior de la semana:
SER AMABLES: DANDO UNA SONRISA, ESCUCHANDO Y , AYUDANDO
Te
invito a seguirnos en
FM 100.3 www.iberoamerica.tk