una caricia para tu alma

Una caricia para tu alma. Nº 35
CREE: (centro de recuperación espiritual ecuménico)
Dir. Francisco Vacazur
Los elogios
Hablar del elogio es hablar de una palabra medio olvidada, a veces desacostumbrada, porque está ausente en muchos lugares como en los lugares donde nos movemos, los esposos no dicen nada, los hijos se olvidan o no están acostumbrados, ni formados, los jefes algunos solo piden, por eso mi misión es despertar este don que hace tanto bien y reproduce la felicidad como provoca un descanso y el lugar se convierte en un lugar de paz. Hablar de elogios será animarse a no caer en la falsedad ni en el interés personal, sino en decir lo que debe ser, lo que debemos decir a la persona que con quien compartimos para que se sienta felíz y tenga ganas de hacer las cosas con otra predisposición. Elogiar a una persona es RECONOCER, es VALORAR, darse cuenta que puso garras, puso entusiasmo y deja sus huellas, por tanto es una llave para hacer feliz y está en la responsabilidad de cada uno. No temas elogiar, no temas hablar bien, exaltando al otro para que hagas sentir mejor.¿quien no se siente mejor si alguien valora lo mínimo que hace?...hace bien, te lo aseguro, por eso no temas, solo vuelve a empezar sin olvidar y pedir a Dios que te dé una mano y así como te sientes amado por Dios puedas tú también elogiar a tus cercanos.
El elogio es una semilla a sembrar para que algún día veas los frutos, solo prueba con decir ¡que lindo!, que bueno!, ¡que grande!., solo anímate a darle un sabor a las personas que esperan y viven a tu lado, por tanto no temas si al elogiar te maltratan porque esto es sembrar, es sacrificarse, es arriesgarse…
Dios te ayude, hoy me toca elogiarte a vos por ser mi lector…sos un regalo de Dios. Hasta la próxima.