Paz a tu
corazón!!!
EXPRESIÓN DE
MI ALMA
Dános tu espíritu para volver la mirada a la justicia, y
apreciar lo que es justo sin olvidarnos que nuestro amparo eres Tú.
Bendice a todos los que trabajan incansablemente construyendo
y defendiendo la justicia de verdad.
Perdona a los que se olvidan de ser justos a la hora de
hacer y decir lo que hace bien al corazón.
Esperando estés bien junto a los que te rodean, nos
tomamos el atrevimiento de hablar de la justicia como valor que debemos todos
recuperar, reflexionar y transmitir con el ejemplo como exigir ante quienes
deben traernos justicia.
Habrá muchos conceptos que hacen a la responsabilidad
y a la conciencia personal, ya que se trata de vivir en la verdad, ser
equitativo y dar lo que cada uno se merece. Para hablar de justicia sería bueno
empezar por uno mismo, darle el sentido y hablar de nuestra propia vida. ¿
somos justos? ¿ actuamos con justicia ante las cosas que recibimos y hacemos? Se
trata de tomar conciencia de nuestras propias actitudes cuando tomamos
decisiones, tenemos que dar una opinión o estar de acuerdo en algo que hacemos
o nos hacen.
Hay justicia cuando damos sentido a la vida, cuando
sabemos aprovechar las horas, cuando hacemos el bien que nos proponemos y damos
el lugar a las cosas y los momentos como corresponde.
La justicia para con los demás no se trata solo de
exigir sino de aprender, promover y enseñar y por sobre todo saber dar una
oportunidad, pero sería justo sentirse escuchado, y respetado, sería justo que
no nos mientan, que valoren nuestras acciones y que reconozcan también nuestra
verdad.
Tenemos que traer la justicia a nuestras casas, a
nuestra sociedad, a nuestras instituciones, por ello debemos luchar, aportar
desde un cambio de mentalidad para ser felices y tener bien estar ya que todos
nos merecemos lo mejor. En muchos de los casos es más fácil vivir en la
comodidad y por miedo, es más fácil callarse y dejar pasar las cosas, pero así
no cambiamos ni construimos nada, somos cómplices de las injusticias.
Debemos pensar también en la justicia Divina que no
sea para vivir castigados por ideologías que
quitan la posibilidad de volver a empezar, sino que sintiéndonos perdonados,
amados, esperados seamos justos en reconocer que vale la pena creer. Que Dios
nos ayude a vivir en la justicia y en la verdad.